A través del sitio GameIndustry, un representante directo de Nintendo menciono que la venta de consolas Wii U todavía no es rentable para la compañía, por ello cada consola vendida actualmente aun es considerada una perdida monetaria para la gran N. En esta fuente se agrega que es un papel importante dentro del mal desempeño de la empresa nipona durante el último año fiscal, con un reporte de pérdidas cerca de $387 millones de dólares.

En el transcurso de las últimas fechas del pasado mes, Nintendo reveló que las ventas generadas por su reciente consola habían quedado mucho a deber, con apenas la cantidad de 3.61 millones de unidades desde su lanzamiento en Noviembre del 2012. Estas cantidades son contrastantes si nos ponemos a compararlas con las ventas inesperadas de Wii en Junio pasado, donde la plataforma consiguió rebasar los 100 millones de aparatos vendidos.

Una pieza clave de la venta constante de Wii U es el lanzamiento de Pikmin 3, sin embargo solamente fue un respiro para la compañía pero deja a esta consola con un futuro muy tambaleante. Sin pensarla mucho, se puede deducir que el fuerte de la consola no está en sus desarrolladores externos, entonces por ende necesita la salida de más exclusivas las cuales en momentos así urgen para retomar el camino. Por ahora Satoru Iwata prometió darle un seguimiento adecuado a Nintendo para volver a posicionarse en el mercado, pero que ahorita la situación no pinta a favor de ellos.

Hay que tener en cuenta el gran poder que la compañía posee, por esta razón ni situaciones así podrían llevarnos a considerar la extinción de esta casa, principalmente por el gran éxito incuestionable de sus portátiles. Lo que si tenemos que esperar es el día en que Nintendo pueda presumir de su consola de mesa una vez más.

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